El interés de la sociedad por lo sustancial

May 28, 2024 | Columnas de Opinión

“La sociedad civil no quiso desaprovechar la oportunidad que tuvieron en nueve meses de encuentros, para discutir, además de lo procedimental, los asuntos sustantivos”.

Germán Valencia

Instituto de Estudios Políticos

german.valencia@udea.edu.co

El sábado 25 de mayo de 2023, la Mesa de Negociación entre el Gobierno nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) dieron por concluido el punto 1 de la Agenda de México, llamado “Acuerdo sobre el desarrollo del proceso de participación de la sociedad en la construcción de la paz” (Acuerdo No 28).

Este es un documento de 10 páginas, firmado por la mayoría de sus delegados, donde la Mesa resume en 9 puntos lo que será el objetivo de la participación, el carácter y principios, los ejes transformadores y los sujetos, escenarios y mecanismos. Así mismo, los enfoques, las garantías, las estrategias de comunicación y la forma como se hará el seguimiento y evaluación a la participación de la sociedad en el proceso de paz con el ELN.

La construcción de este importante Acuerdo —que tiene como insumo tres archivos:  1) el Diseño de Participación, 2) un Plan Nacional de Participación y 3) unas Recomendaciones, y que estarán a disposición de la sociedad para su consulta— no fue fácil. En él está contenido el tiempo de 8.565 representantes de 3.217 organizaciones en todas las regiones del país, que en 78 pre-encuentros y encuentros de orden regional, nacional e internacional dieron forma y contenido a los tres documentos entregados.

Además, después de ser presentados ante la Mesa de Negociación sufrieron la crítica de varios sectores, entre ellos, de los empresarios. Los críticos consideran que el Comité Nacional de Participación (CNP) no los escuchó, pues no se sienten identificados con su contenido, además cuestionan los resultados, pues para ellos, la gente se excedió en las atribuciones para las que fueron encomendados.

En otras palabras, los críticos no ven bien que el Comité, en lugar de entregar un documento ceñido estrictamente a proponer unas metodologías para participar la sociedad en la siguiente fase del proceso, lo que hizo fue entrometerse en identificar y proponer unos temas de fondo que presenta las transformaciones en el régimen político, en el modelo económico, en la política ambiental y en la educación y cultura.

En este texto quiero dejar claro que, aunque es cierto que el CNP incorporó en los documentos que presentó a la Mesa de Negociación más elementos de los que se le pedía, el resultado debe saberse leer y aprovechar para proyectar el futuro de lo que será el proceso de paz con este nuevo actor y atender los retos que tendrá está nueva etapa de diagnósticos y propuestas de transformación.

Hay que reconocer que lo que hizo el CNP fue tomar nota de lo que se discutió y acordó por las diversas organizaciones de la sociedad civil. Quienes, además de lo procedimental, revelaron el interés genuino que tienen en que se hagan unas transformaciones necesarias para finalizar los conflictos en los territorios, lo que pasa por pensar en otros modelos económicos, en las transformaciones políticas y en lograr ganar como comunidades autonomía y gobernanza.

En conclusión, la sociedad civil no quiso desaprovechar la oportunidad que tuvieron en nueve meses de encuentros, para discutir, además de lo procedimental, los asuntos sustantivos. Para identificar los temas críticos que avivan el conflicto y lo profundizan, y señalar aquellos ejes de transformación que con urgencia es necesario implementar en sus territorios para poder desarrollarse y mejorar sus condiciones de vida.

*Esta columna es resultado de las dinámicas académicas del Grupo de Investigación Hegemonía, Guerras y Conflicto del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Antioquia.
**Las opiniones expresadas en esta publicación son de exclusiva responsabilidad de la persona que ha sido autora y no necesariamente representan la posición de Isegoria al respecto.