“Así como la guerra es muy masculina, la paz debe ser muy femenina, es construcción de vida”: Otty Patiño

Sep 11, 2023 | Artículos Periodísticos

Otty Patiño, jefe de la delegacipón de Gobierno en las negociaciones con el ELN, concedió la siguiente entrevista a una alianza de medios, a propósito del cierre del cuarto ciclo de negociaciones.

Foto: Danna Urdaneta (@dannavenezolana en X).

Danna Urdantena*

Periodista

Alianza de medios

El pasado 4 de septiembre terminó en Caracas el cuarto ciclo de la Mesa de Diálogos entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). A propósito de esto, Otty Patiño, jefe de la delegación de paz del Gobierno, accedió a una entrevista colaborativa de organizaciones, partidos y medios alternativos de América Latina para responder a temas sensibles del proceso de paz.

 El Gobierno de Petro y el ELN están comprometidos con el proceso de paz, ¿tres años que quedan del Gobierno sí es tiempo suficiente para lograr un acuerdo que satisfaga a la sociedad, al ELN y al propio gobierno?

 El problema no es tanto que haya una sociedad insatisfecha, sino que lleguemos a unos niveles mínimos de satisfacción, donde se hagan inútiles las armas y que podamos tramitar los conflictos de otra manera y no por medios violentos. Ese es un poco el sentido que tiene también la Paz Total, ya que tiene la posibilidad de que estos tres años de Gobierno nos señalen un horizonte más claro al cual creo que no va a renunciar ninguno de los gobiernos subsiguientes.

 Sobre la política de Paz Total. ¿Cree que las expectativas generadas sobre la idea de Paz Total son tan altas que cualquier avance en los procesos abiertos se verá como mínimo e insuficiente?

 Yo creo que la Paz Total no es una utopía, es la aspiración de que en ninguna parte del territorio colombiano gobierne un ilegal y armado. Por supuesto, el Estado no puede renunciar a mantener la soberanía territorial, no puede renunciar al uso de la fuerza, pero también debe buscar la paz de la mejor manera posible a través de los diálogos, para llegar a acuerdos o para lograr el sometimiento de los grupos que están por fuera de la ley para que se acojan al régimen institucional de Colombia.

 ¿Cuáles serían los siguientes pasos a seguir y hacia dónde va la agenda del quinto ciclo?

 Hay un tema que hemos tratado de introducir desde el comienzo y es que este proceso se feminice. Nosotros entramos con una delegación que era paritaria, ocho hombres y ocho mujeres. Desafortunadamente dos mujeres por distintas razones se retiraron, pero, de todas maneras, el espíritu de participación de la mujer ha sido muy importante y se mantiene. Pero queremos que sean más, porque uno comprueba si una paz es buena si las mujeres que han sido combatientes, las que viven los territorios, dejan de sufrir y, por el contrario, se les abre la esperanza de tener una vida digna. Esa es la medición más exacta, y genera la necesidad de que muchas mujeres participen en este proceso de paz.

Así como la guerra es muy masculina en términos generales, la paz debe ser muy femenina, es construcción de vida. Las mujeres entienden eso con una rapidez necesaria para convencer a muchos hombres, sus hijos, sus hermanos, de dejar las armas y empezar a luchar de otra manera por un país distinto.

 ¿La declaración de zonas críticas es un reflejo del trabajo de las Caravanas Humanitarias en Bajo Calima y Medio San Juan? Si es así, ¿se espera una nueva Caravana Humanitaria en el Bajo Cauca o entrarán a trabajar directamente en las acciones y dinámicas humanitarias?

 Se empezó con el tema de las dinámicas humanitarias como un alivio en lugares donde la gente lo está clamando, donde el Estado Social de Derecho no ha llegado a esas zonas. Esos son los alivios que están abriendo nuevas posibilidades y nuevos sitios donde hay puntos críticos.

En este momento cuando hablamos de zonas críticas nos referimos a la posibilidad de penetrar a las comunidades para construir transformaciones, y donde el Estado pueda concentrar recursos para solucionar temas que ahí se están dando y pueda crear otras condiciones.

Desde luego hay situaciones complicadas en muchas partes del país, pero los sitios críticos no son todos. Las zonas críticas reúnen una serie de condiciones bastante miserables donde el conflicto armado en lugar de solucionar los problemas de la miseria, el abandono, la insalubridad, al contrario, los han profundizado. Territorios donde la lucha armada se ha vuelto inútil porque está agobiando aún más a la gente que vive allí.

Ya no se trata de hacer alivios, sino de generar condiciones para que la gente, con apoyo del Estado, pueda dar un paso adelante hacia un futuro mejor para sí mismos y para sus descendencias.

 Hay más de 12 muertos del ELN, según el personero de Tame en Arauca, además de heridos y prisioneros también en poder del Estado Mayor Central por los combates que hubo desde hace una semana en la vereda Siberia I. ¿Estos hechos del conflicto afectan al proceso en la medida de que el movimiento social araucano, Revista Raya, la Fundación de Derechos Humanos Joel Sierra, y otra lista más grande, con insurgencias colombianas incluidas, han denunciado con pruebas a estas estructuras del Décimo Frente, Frente 28 y Frente 45 como paramilitares?

 Es muy complicado porque son disidencias de las FARC y plantearlo de una manera simplista no es tan fácil. Claro, en Colombia hay prácticas paramilitares, eso es evidente. Hay momentos en que funcionarios y autoridades militares, incluso civiles, apoyan y se relacionan con estos grupos contra otro grupo armado. Esa relación de la institucionalidad con actores ilegales para combatir a otro actor ilegal es una práctica muy recurrente en Colombia.

Llevamos sesenta años o más de lucha contrainsurgente con unas doctrinas que plantean como prioridad la seguridad nacional establecida contra la gente que lucha los cambios, contra la izquierda. Pero ha habido procesos de reflexión, incluso dentro de las propias Fuerzas Armadas que están construyendo una nueva doctrina que ya no es la de seguridad nacional, sino la de una vez operado el conflicto contrainsurgente.

Afortunadamente, y esta es la voz optimista, con el grupo del EMC FARC empieza a haber un diálogo y la posibilidad de un entendimiento, y creo que ellos mismos han lanzado una carta al ELN, pidiéndoles que dejen esa matazón. Y eso me parece que tiene un valor muy importante, porque es la posibilidad de que estos diálogos y este cese al fuego bilateral, se conviertan en un cese de fuego multilateral que permita que terminemos esta matazón, esta guerra y estos hostigamientos contra la población civil de una manera mucho más global.

 En recientes declaraciones el comandante Antonio García del ELN dice que se están incumpliendo los acuerdos porque esta organización guerrillera sigue en la lista de Grupos Armados Organizados (GAO). ¿Cuál es la respuesta del Gobierno nacional?

 La delegación del Gobierno ha hecho a instancias del ELN todas las diligencias posibles, pero como se trata de una ley eso significa una lucha dentro del Congreso de la República, pero el Gobierno desde el inicio ha aclarado de distintas maneras que estamos en una negociación política con una organización política rebelde. Eso es darle estatus político al ELN y a la negociación, y ha dictado por lo menos cuatro resoluciones y un decreto para reafirmar esa condición de grupo armado rebelde y no de GAO.

De tal manera que ahí me parece que es una exageración y mal, digamos, por parte de Antonio García, decir que nosotros hemos incumplido cuando sí hemos hecho, y él lo sabe, todo lo que ha estado a nuestro alcance para que no estén en esa lista o en esa categoría de GAO.

 ¿Después de un mes de un cese al fuego bilateral entre el Gobierno colombiano y el ELN cuál es el balance que hace la delegación de paz del gobierno?

 En un mes solamente se puede decir que hubo el despliegue en las regiones del Mecanismo de Monitoreo y Verificación, y que los incidentes que antes pasaban desapercibidos empiezan a contabilizarse, y eso ya es muy importante para mirar cómo esos incidentes no se repiten, cómo se pueden evitar.

Creo que ese elemento de poner el reflector a todos esos hechos que antes pasaban como una simple noticia, ya es muy importante. Sobre esos hechos empieza a generarse un castigo social y un castigo ético, además de la punibilidad.

 ¿Cómo prevenir estos incidentes?

 Por un lado, produciendo nuevos entendimientos, sobre todo en el territorio porque, si bien se pueden dictar órdenes de carácter nacional, los frentes de guerra del ELN a veces tienen unas dinámicas y situaciones que les hace muy difícil poder cumplir con las órdenes de cese al fuego. Un caso es lo que está pasando en Arauca, que son atacados o atacan a las fuerzas que están en proceso de disputa territorial y es muy difícil en esa situación hacer un cese al fuego.

Por el lado de las Fuerzas Militares también hay que hacer un esfuerzo importante, porque si bien hay comandantes militares que cumplen realmente al pie de la letra las órdenes militares, hay otros que se mueven o facilitan que estas fuerzas ilegales se embalen entre sí pensando que con eso están ayudando a acabar una guerra y pasa lo contrario. Además porque con esas otras fuerzas pueden hacer, no solamente entendimientos de orden ideológico, sino entendimientos de orden incluso económico. Es decir, ganan obteniendo resultados y ganan obteniendo beneficios económicos.

 ¿Qué ha hecho la delegación de paz del Gobierno colombiano con estas denuncias de las disidencias en Arauca que han atentado todo este tiempo contra el tejido social en el departamento?

 Yo he recibido quejas de acciones que ha hecho el ELN allá y sé que el ELN ha tenido una presencia muy fuerte en Arauca, que mucha parte del territorio araucano y la política de Arauca ha sido en buena parte dominada o manejada por el ELN. Pero también he oído voces que critican que ese manejo y ese dominio incluso ha creado alianzas no muy santas del ELN con políticos corruptos allá de Arauca.

Hay un cansancio en Arauca también de la guerra y los militares no están muy dedicados a proteger los derechos humanos de la gente, sino a proteger las empresas de petróleo. Hay una fractura entre población y Fuerzas Militares, las fuerzas policiales no tienen capacidad de despliegue para poner orden en esos territorios, viven acuartelados en sus municipios, no salen a una cuadra de sus cuarteles, viven atemorizados de que si salen los puedan matar. Y el ELN ha creado un régimen de temor allá, régimen que ya la gente se resiente.

Pero también este grupo del EMC tampoco está ayudando a que se creen nuevas condiciones, está atacando, está tratando de conquistar ese territorio sin que signifique la posibilidad de la instauración de una democracia allí.

Se creó una Mesa Permanente por la Paz ahí en Arauca, y creo que la gente de la zona está empezando a plantear que hay que buscar la paz y no simplemente apoyar a tal o cual van de los que están disputando el conflicto.

 En los Acuerdos de Caracas publicados hoy hay un acuerdo parcial sobre el desarrollo de metodología para atención de prisioneros políticos del ELN, ¿qué nos puede adelantar sobre estas metodologías?

 Se empezó con el tema de unos alivios para personas enfermas del ELN, conseguir que pasaran de presos intramurales a presos domiciliarios para poder para que pudieran tener mejor atención en salud. Allí se creó una comisión conjunta del ELN con algunos gestores y con el gobierno.

En este momento se creó una comisión jurídica que va a mirar no solamente los obstáculos legales, sino también temas como ineficiencia, corrupción y temas estructurales. Aquí en Colombia este Gobierno ya ha elaborado un proyecto de ley para la humanización de todo el sistema carcelario y penitenciario. Por supuesto, eso demora lo que demora el Congreso en sacar una ley sobre eso.

Se habla de un perfilamiento a raíz del que son declarados GAO, por lo que nosotros hemos planteado la posibilidad de que se cambie esa denominación mediante un decreto del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).

 

*Para leer la entrevista completa puede dar clic en el siguiente enlace.

*Danna Urdaneta es corresponsal de Marcha Noticias de Argentina y realiza esta entrevista el 4 de septiembre de 2023 en colaboración con organizaciones y medios de Venezuela (Comité de Solidaridad Internacional y Lucha por la Paz con la membresía del World Peace Council, Aporrea, 4F del Partido Socialista Unido de Venezuela, La Tabla, periódico El Colombiano, el programa “Migrante y migración” de la Radio del Sur, “Somos Colombia” de la radio YVKE en el estado Zulia, Radio Comunitaria Al Son del 23 en Caracas), de Colombia (Semanario Voz del Partido Comunista Colombiano, Colombia Informa, Isegoría de la Unidad de Paz de la Universidad de Antioquia, Prensa Rural, Corporación para La Paz y el Desarrollo Social Corpades, Análisis Urbano), Chile (Diario La Razón), de Argentina (Cartago TV, Resumen Latinoamericano y Marcha Noticias), de México (El Machete del Partido Comunista de México) de Suecia (Radio Orinoco y Resolver), Uruguay (Periferia Uruguay) y Francia (Reacción Revista Digital).