Foto: en la mañana del miércoles 10 de abril, la Delegación del Gobierno publicó esta foto en su cuenta de X y anunció su viaje a Venezuela para continuar los diálogos con el ELN. Créditos: @DelegacionGob

Caterine Jaramillo Gonzáles

Equipo de periodismo de Isegoría

Las delegaciones del ELN y del Gobierno se preparan para una reunión extraordinaria este viernes 12 de abril, luego de que esa guerrilla propuso ese encuentro en una carta remitida el pasado 6 de abril. En la comunicación, dirigida a Vera Grabe, jefe de la delegación del Gobierno, el ELN se refiere a una “doble política de paz del gobierno”, por lo que, agrega esa organización, no existen “las condiciones suficientes para realizar el acostumbrado ciclo de conversaciones”.  

Hay que recordar que el último ciclo tuvo lugar en La Habana, entre el 22 de enero y el seis de febrero. Trece días después, luego de las declaraciones del gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar Jaramillo, donde confirmó el inicio de los diálogos regionales en su departamento con el frente del ELN Comuneros del Sur, la delegación del grupo guerrillero anunció el llamado a consultas a sus delegados y el congelamiento de los diálogos.  

En ese momento, el ELN calificó tal acción como una violación a los acuerdos firmados, ya que en el punto siete del protocolo de acciones específicas quedó consignado que el Gobierno no puede desarrollar “operaciones de desmovilización individuales y/o colectivas y de desarticulación de ninguna forma a estructuras del ELN”. 

Una semana después, Antonio García, primer comandante del Ejército de Liberación Nacional, ofreció más detalles sobre la situación en Nariño en su columna de opinión titulada La razón de la sinrazón: “Lo que realmente viene sucediendo es una operación de inteligencia militar iniciada por gobiernos anteriores, que Iván Duque mantuvo activa para golpear a profundidad al ELN”. Además, en esa misma columna acusó a los mandos de dicho frente de ser agentes de inteligencia militar. 

En la tarde de ese mismo día, ambas delegaciones publicaron en sus cuentas de X el Comunicado Conjunto Nro. 22. En él que anunciaban que, como resultado de una reunión desarrollada en La Habana entre los días 24 y 26 de febrero, la delegación del ELN continuaría el llamado a consultas, el séptimo ciclo tendría lugar en Caracas del 8 al 22 de abril y se continuaría el desarrollo de las actividades previstas en los acuerdos. 

Aparentemente, las tensiones se habían apaciguado, hasta que el 12 de marzo, el Frente Comuneros del Sur anunció no solo el compromiso de emprender acciones de desminado humanitario en la zona, sino que también reiteró su intención de participar en los diálogos regionales de Nariño. 

Precisamente ese mismo 9 de marzo, cuando comenzaron estos diálogos, Antonio García publicó en su cuenta de X un hilo donde aclaró que esta iniciativa con una “estructura del ELN en Nariño inició a finales de 2022, al mismo tiempo que la operación de infiltración que fue descubierta”.  

Según García, tanto el presidente Petro como el Alto Consejero para la Paz, Otty Patiño, conocían del operativo y decidieron continuar, con el objetivo de presentar al ELN dividido. Además, agregó que este frente estaba siendo protegido por Unidades de la Policía para la Edificación de la Paz (UNIPED) y dos unidades de las Fuerzas Militares del Estado.  

La controversia no paró ahí, y el 18 de marzo García volvió a referirse al tema de Nariño en una nueva columna de opinión que tituló Las trampas de la guerra y de la paz: “Repetimos que en dicho grupo hay varios agentes de inteligencia militar del Estado infiltrados y que lograron hacerlos pasar como Mandos, el principal llamado Miguel A. realizó operaciones contra estructuras y mandos del ELN en varias regiones del país” (sic). 

Con la afirmación de que el plan de inteligencia fue asumido por “Petro y lo mantuvo paralelo al plan de diálogos”, García se anticipó a la frase que aparece en la carta dirigida por la delegación del ELN a Vera Grabe y en que propone la reunión previa al ciclo de Caracas: “La doble política de paz del gobierno”. 

Por el otro lado, desde que iniciaron las tensiones en la mesa por la situación en Nariño, Otty Patiño no solo ha defendido la territorialización de la paz, sino que también ha insistido en que lo que pasó en ese departamento del Pacífico colombiano es una muestra de crisis internas.  

En una entrevista reciente publicada por La Silla Vacía, el Alto Consejero para la Paz le puntualizó al periodista Santiago Rodríguez que lo “único que le diría al COCE es que miren con atención lo que su propio frente puede hacer en Nariño”. 

Más allá de las especulaciones que pueda suscitar la reunión, lo cierto es que la asistencia de Antonio García está confirmada a la reunión extraordinaria el 12 de abril. El mismo García en una serie de trinos publicados este miércoles, dijo que el proceso había estado “en modo pausa” y que de esa forma el ELN “se abre a conversar. Abre una puerta para examinar si el Gobierno va a cumplir o no lo acordado”.